Existen muchas formas de pagar menos en la factura de electricidad. Hoy os vamos a hablar de dos ideas básicas a tener en cuenta.
1. Reducir el consumo
Los aparatos que más electricidad consumen son aquellos que dan calor: hornos, lavadoras (al calentar agua), radiadores, termos, etc. Se recomienda moderar el uso de estos aparatos y cuando sea posible sustituir los más viejos por aparatos nuevos más eficientes.

Las bombillas LED también pueden ayudarle a ahorrar, ya que en los últimos años se han abaratado mucho y su consumo con respecto a una bombilla tradicional es muy inferior.
2. Reducir potencia contratada
Las compañías eléctricas cobran por la potencia contratada incluso aunque no se use. Esto es, por ejemplo, como si alquilamos una casa grande para que viva solamente una persona. El alquiler será alto aunque la casa no se aproveche.
Por eso es importante mirar en nuestra factura la potencia contratada e intentar reducirla para que se ajuste a nuestras necesidades.
En muchos hogares con 2 o 3 personas e instalación de gas, puede ser suficiente incluso con potencias inferiores a 3 kilovatios, consiguiendo así un ahorro significativo en la factura.